CeramicaUnaiCariñena

Para mí la cerámica es una forma de relacionarse con el mundo y conmigo mismo. Es un camino para aprender, relacionarse, expresarse y compartir. Tomo lo que me llega, lo transformo y le doy continuidad intentando generar sentido.

Cuando más disfruto es en esos fugaces momentos en que el mundo se detiene y sólo hay presencia. Tú, el barro y lo que sucede. Es un flujo entre lo abstracto y lo posible que se materializa y llena de significado.

Cada pieza hecha es diferente y unica, y todas tienen algo que contar. Algunas responden principalmente a una necesidad práctica y funcional, intentando fluir entre los actos cotidianos, pero también procuro que cada pieza sea una experiencia estética estimulante.

El diseño es un proceso de ida y vuelta. Cada elemento es un legado de todo lo que es y un deseo de todo lo que es potencia. Mi trabajo es una búsqueda o encuentro afortunado en esa relación.
Trabajo en base a lo que conozco y con un propósito aproximado, pero después es el mismo proceso el que me va guiando en cada paso. Cada pieza acabada es un círculo que se cierra y que ya no puede alterarse, pero abre otro círculo que nace del anterior como un reflejo familiar, pero expresando su propia particularidad.

Me encantan las plantas! No sólo son el oxígeno que respiramos, el alimento que nos sostiene, la ropa que nos viste, el papel en que escribimos y leemos... también son hermosas! La ciudad es un artificio que nos separa de entornos naturales y tener plantas en nuestras casas nos acerca a esa relación y nos recuerda que somos parte de un todo.

Me gusta la textura fresca del musgo, las formas de los helechos, el olor seco del pino, la carnosidad de un cactus o la sensación de caminar dentro de un bosque.